Los mapas de riesgo son una herramienta útil para visibilizar la violencia existente contra las mujeres en las comunidades donde se implementa el proyecto. Además, a través de ellos, se pretende analizar cómo las mujeres perciben el peligro, el riesgo y los lugares seguros de sus comunidades y qué tipos de apoyo se deben gestionar con las diferentes instituciones del municipio para minimizar los riesgos y peligros. Es decir, que sirvan para ejercer control ciudadano en cuanto a la protección de los derechos de las mujeres.