En el marco del proyecto «Promoción del desarrollo socioeconómico de mujeres con perspectiva de género en el municipio de El Viejo, Chinandega fase II«, cofinanciado por la Agencia Extremeña de Cooperación para el Desarrollo (AEXCID) y ejecutado por APADEIM y Fundación Mujeres. Se ha promovido el financiamiento para el establecimiento de negocios en las comunidades rurales de El Viejo.

Desde la puesta en marcha del Fondo Rotatorio, en 2016, se han financiado 104 negocios de mujeres de la zona. Por otro lado, 21 mujeres, tras cancelar su préstamo, han vuelto a solicitarlo para seguir fortaleciéndose.

En cuanto al pago del fondo, sólo 8 mujeres no están al corriente de pago (7,6% de las mujeres financiadas), de las cuales 5 comenzaron sus cuotas bien, pero a los 8 o 9 meses se frenaron. Las 3 restantes han tenido situaciones familiares delicadas que han repercutido en sus negocios, pero han manifestado la intención de ponerse al día con los pagos lo antes posible.

En los primeros días de mayo, el equipo técnico de APADEIM, junto al equipo de la Asociación de Comunidades para el Desarrollo de la Península de Cosigüina (ACODEPEC), han realizado una visita de seguimiento para valorar la situacion, tanto de los negocios como del fondo rotatorio en la comunidad. Tras ver que los negocios de las mujeres que no han pagado algunas cuotas, tienen buen funcionamiento, se acordó que retomarian sus pagos pendientes a partir de julio.

Hay que tener en cuenta el contexto socio-político existente, el cual, tras 40 días de protesta, tranques, paro nacional y disturbios, en los han muerto decenas de personas y otras muchas han resultado heridas o desaparecidas, ha generado un ambiente de inseguridad y tensión que afecta a la economía de la población nicaragüense, especialmente de las zonas más empobrecidas.

Es muy importante mencionar que, aunque en Chinandega no se han sufrido hechos tan violentos como en otras zonas del país, el impacto económico se siente. Las empresas han suspendido muchas actividades y en consecuencia se ha despedido a parte del personal. Al no trabajar, la gente no dispone de recursos para poder comprar los productos básicos, a la vez que éstos se encarecen por la dificultad que supone distribuirlos por el país.

Las mujeres de las comunidades nos han comunicado que no hay gente con efectivo que demande ropa, perfumes, etc. ya que se está priorizando el poder comprar arroz y frijoles, y al menos poder contar estos productos en su dieta. Es por esto que, durante este mes de mayo, sólo se ha recuperado un 56% de lo proyectado. El equipo técnico, está orientando a las beneficiarias que, hoy más que nunca, deben de llevar los controles de forma más ordenada, para poder ir tomando decisiones sobre los excedentes. Además, se está haciendo un llamado a la organización comunitaria, para la búsqueda de alternativas que les permita poder negociar mejor. Por ejemplo, esto se ve claramente en los negocios de cerdos, hacer ventas colectivas con la idea de lograr mejor precio.