Prevención de la violencia de género: estrategia de intervención con hombres

Prevención de la violencia de género: estrategia de intervención con hombres

Desde el año 2015, Fundación Mujeres y la Asociación para el Desarrollo Integral de la Mujer (APADEIM) están trabajando en Nicaragua en el Proyecto “Prevención de Violencia, mejora de la salud física y emocional y empoderamiento de las mujeres en 10 comunidades de El Viejo (Chinandega) FASE I”, cofinanciado por la Xunta de Galicia.

El objetivo principal de este proyecto es el trabajo con las mujeres, principalmente mujeres rurales, en el fortalecimiento de sus capacidades para el empoderamiento, la defensa y demanda de sus derechos sexuales y reproductivos y el derecho a una vida libre de violencia. Para la consecución de este objetivo, es importante destacar el trabajo que se realiza de manera complementaria con los hombres de las comunidades, de cara a fortalecer los procesos desarrollados con las mujeres y que estos no se conviertan en obstaculizadores de los mismos.

Los hombres con los que se trabaja en el marco de esta intervención tienen algún vínculo cercano o afectivo con las mujeres del grupo meta principal (pareja, padre, hijo, hermano, tío, suegro, yerno, etc.) y el trabajo que se realiza con ellos es, principalmente, de sensibilización y deconstrucciónde masculinidades machistas, haciéndolos conscientes de los aportes y beneficios de la participación efectiva de las mujeres en la sociedad.

Las actividades de capacitación que se realizan con el grupo de hombres beneficiarios del proyecto tienen como finalidad que estos conozcan las causas y consecuencias de las desigualdades de género y las formas de discriminación y violencia contra las mujeres, haciendo especial hincapié en lo relativo a los cuidados de la salud física y emocional de las mujeres.

El trabajo en masculinidades es parte de la estrategia para erradicar la violencia de género, lo cual conlleva un proceso de sensibilización que hace énfasis en el cuestionamiento y reflexión para la deconstrucción de la masculinidad tradicional, visibilizando a los hombres como sujetos de cambio desde una responsabilidad personal y colectiva. Se trata de promover nuevas prácticas en los hombres relacionadas con el respeto de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, fomentando el ejercicio de una sexualidad responsable, así como el establecimiento de relaciones afectivas, equitativas y respetuosas con las mujeres.

La metodología implementada es vivencial, participativa, lúdica y reflexiva donde se desarrollan actividades como:

  • formación sobre género, violencia basada en género y salud sexual reproductiva
  • grupos de reflexión entre hombres
  • ferias de divulgación
  • movilizaciones comunitarias
  • intercambios de experiencias y encuentros intercomunitarios

Durante este proceso se promueven los cambios de conocimientos, actitudes y prácticas en los hombres en cuanto a la manera de ejercer su masculinidad, con la finalidad de cuestionar los roles socialmente asignados y la creación de nuevas alternativas basadas en el enfoque de derechos.

Entre los principales resultados encontrados hasta el momento cabe destacar: la participación y permanencia de hombres en estos espacios donde se promueve el respeto de los derechos de las mujeres; la utilización del diálogo como alternativa en la resolución de conflictos y la toma de decisiones consensuadas en la pareja; el aprendizaje de medidas de protección ante las infecciones de transmisión sexual y embarazos no planificados; mejora en las relaciones de pareja y en la familia así como una mayor integración de los hombres en las responsabilidades del trabajo doméstico, en acciones de prevención de la violencia basada en género y de demandas promovidas por las mujeres por el acceso a la justicia.

Por tanto, aunque la fase I del proyecto ha finalizado a fecha 30 de noviembre y, siendo conscientes de lo estratégico de este tipo de intervenciones, desde Fundación Mujeres continuaremos trabajando en esta línea de cara a la consecución de relaciones igualitarias entre hombres y mujeres y la erradicación de la violencia de género en una segunda fase de intervención con las mismas comunidades, proyecto aprobado y cofinanciado también por la Xunta de Galicia.