Transformando la vida de las mujeres en El Salvador

Transformando la vida de las mujeres en El Salvador

Ángela Castillo, vivía una vida “normal”, tenía un trabajo que le permitía satisfacer sus necesidades básicas, una relación de pareja “estable,” no tenía hijos y no sabía leer ni escribir. En una ocasión le comentaron que darían cursos de defensa personal y ella quiso participar “A mí me dijeron que nos iban a enseñar a defendernos y yo quería ver los sacos de arena para boxear, pero yo solo veía que hablaban, que tenían unos manuales, que nos ponían a trabajar en grupo y yo como no sabía leer, me salía, así hice varias veces, hasta que la facilitadora me pregunto porque me salía y yo le dije que a mí me incomodaba el no saber leer ni escribir”.

Poco a poco Ángela se integró al grupo, ganándose la confianza de las técnicas y viceversa. Tras su confesión de ser analfabeta, la coordinadora de Las Mélidas en zona occidental en ese período, Isabel Fabián, tomó la iniciativa de enseñarle a leer y a escribir en horarios fuera de lo laboral. Así fue como Ángela inició su proceso de alfabetización y puso todo de su parte para poder aprender a leer y escribir.

Después de ese aprendizaje, esta lideresa pudo alfabetizar a otras mujeres, dentro y fuera de su comunidad y pudo iniciar su proceso de formación académica en la modalidad a distancia. Actualmente ha cursado hasta sexto grado y una de sus metas a medio plazo es culminar su bachillerato.

Además, ella ha tenido la oportunidad de formarse en otros procesos como la Escuela de Lideresas nivel 1, 2 y 3, derechos sexuales y reproductivos, y participación ciudadana entre otras temáticas que han contribuido a su empoderamiento.

A mí los procesos con Las Mélidas me han ayudado mucho, he aprendido a respetarme como mujer, a valorar y a hacer que me respeten” comenta Angelita, como es llamada cariñosamente por las mujeres de su comunidad».

Vida organizada en la comunidad

Ángela siempre ha tratado de llevar bienestar a la comunidad, “yo siempre, desde que perdí la pena, he andado metida en todo, fui presidenta de la ADESCO (Asociación de Desarrollo Comunal) y siempre he andado llamando a las mujeres para que vayan a las reuniones, pero no le voy a decir que todo es así de fácil y que una le cae bien a todo mundo y menos a los hombres que no les gusta que una mujer tome decisiones, también me ha costado convencerlas, pero ahí sigo haciendo la lucha”.

Esta lideresa ha contribuido a que mujeres de su comunidad se empoderen y puedan conocer y defender sus derechos en diferentes situaciones. La comunidad Inmaculada Concepción cuenta con un Comité Comunal de Prevención de la Violencia, del que ella y otras lideresas forman parte.

Estas lideresas han sido capacitadas en temáticas relacionadas al quehacer de las instituciones a las que pueden acudir en caso de violencia de género como la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), Fiscalía General de la República (FGR), Procuraduría General de la República (PGR) y Policía Nacional Civil (PNC), entre otras, además de conocer la ruta de denuncia.

Además, Ángela es presidenta de la asociación de Mujeres Emprendedoras del Municipio de Ataco ASMEAVI, en 2006, fue parte del Concejo Municipal de Concepción de Ataco, es la Secretaria Municipal de la Mujer del municipio de Ataco y actualmente es candidata al consejo municipal para las elecciones de 2018.

Yo siempre he estado dispuesta a colaborar con la gente, aquí presto mi casita para que podamos hacer estas reuniones y que todas estemos bien”.

Curando las heridas

La vida de esta lideresa no sólo ha estado llena de alegrías, también ha enfrentado numerosos obstáculos que ha ido superando gracias a las atenciones psicológicas recibidas en el marco de proyectos que ofrecían este tipo de intervención.

Yo ya estaba organizada y todo, ya conocía mis derechos, pero habían grandes dolores en mi corazón, el hecho de separarme de mi mamá a la edad de 15 años, que prácticamente me fui a vivir sola, el hecho de perder a mi hija, y ya no poder tener más hijas e hijos, han sido golpes muy duros que me ha tocado vivir”.

Gracias a la terapia con la psicóloga pude sacar todo ese dolor, ella me trataba bien, me daba la confianza para contarle todo, yo llegaba y me acostaba en un canapé y cuando ella me empezaba hablar yo me sentía libre para dejar todo el dolor atrás”.

Después de varios meses de terapia psicológica “Angelita”, pudo superar las situaciones que marcaron su vida.

No es que una ya no sienta nada y que olvide lo cosas que han pasado, pero si una puede ver que las cosas son diferentes y que no se puede quedar estancado en el pasado”.

Ángela Castillo es una de las lideresas participantes del proyecto “Contribuyendo a la erradicación de la violencia contra las mujeres y niñas en el Occidente de El Salvador”, ejecutado por Las Mélidas, en coordinación con Fundación Mujeres y el apoyo financiero de la AEXCID.