El taller ha tenido dos características metodológicas fundamentales: la primera el carácter de retroalimentación de las propias participantes y la segunda la reflexión y debate sobre los distintos contenidos y conceptos que se han tratado a lo largo del taller.
Se trabajado con las participantes en la identificación de las desigualdades de género, en términos generales y particularmente las derivadas de los cuidados de personas dependientes en el ámbito familiar.
Se ha incidido en la importancia que tienen los cuidados informales dentro de la sociedad y el coste que tiene particularmente para las mujeres cuidadoras. Así mismo se hecho hincapié en la dedicación de tiempos y las repercusiones que tienen en las mujeres y sobre sus proyectos de vida la dedicación a los cuidados de personas dependientes en el entorno de la familia, así como la importancia de compartir y hacer partícipes a las personas de su entorno en los cuidados.
Por otra parte se ha sensibilizado a las participantes sobre la importancia de visibilizar y valorizar dichos cuidados en el entorno familiar.
El taller se ha desarrollado en un ambiente cálido y de confianza, que ha sido posible gracias al espacio para el debate, la realización de distintas dinámicas y la exposición de sus propias historias de vida, dando lugar a análisis de situaciones y motivos para el cambio.
Al finalizar, las participantes expusieron su conformidad con la puesta en práctica del taller, afirmando ser un lugar para el intercambio y la desconexión, en el que han aprendido cosas interesantes y se han propuesto incorporar pequeñas modificaciones en sus rutinas diarias que favorezcan la corresponsabilidad con sus familias.